Las unidades de procesamiento gráfico (GPU) se han convertido en un componente fundamental para la mayoría de los sistemas informáticos. Sin embargo, algunas veces, el costo de una GPU de alta gama puede ser prohibitivo para algunos usuarios. Es por eso que ha surgido una nueva opción: la GPU de escritorio de bajo costo. Estas GPUs ofrecen un rendimiento aceptable para la mayoría de las tareas de computación, pero a un precio más accesible. En esta presentación, exploraremos las características y beneficios de las GPUs de escritorio de bajo costo y cómo pueden ser una opción atractiva para aquellos con un presupuesto limitado.
Descubre cuál es la tarjeta gráfica más económica del mercado en 2021
Introducción
Las tarjetas gráficas son uno de los componentes más importantes en un ordenador, ya que se encargan de procesar y renderizar los gráficos y las imágenes en la pantalla. Pero, ¿qué sucede si queremos construir un equipo de bajo costo? ¿Existen opciones viables en el mercado? En este artículo hablaremos sobre las GPU de escritorio de bajo costo y descubriremos cuál es la tarjeta gráfica más económica del mercado en 2021.
¿Qué es una GPU de escritorio de bajo costo?
Las GPU de escritorio de bajo costo son tarjetas gráficas que ofrecen un rendimiento decente a un precio asequible. Estas tarjetas son ideales para aquellos que quieren construir un ordenador básico para tareas cotidianas como navegar por internet, trabajar con documentos de ofimática o ver películas.
¿Cuál es la tarjeta gráfica más económica del mercado en 2021?
Después de investigar en el mercado, hemos encontrado que la NVIDIA GeForce GT 1030 es la tarjeta gráfica más económica del mercado en 2021. Esta GPU ofrece un rendimiento decente para tareas cotidianas y juegos ligeros.
La NVIDIA GeForce GT 1030 cuenta con 2 GB de memoria VRAM GDDR5, una frecuencia de reloj base de 1227 MHz y una frecuencia de reloj turbo de 1468 MHz. Además, cuenta con tecnologías como NVIDIA CUDA, NVIDIA PhysX y DirectX 12.
Descubre la tarjeta gráfica mínima necesaria para tus necesidades: Guía completa
Si estás buscando una GPU de escritorio de bajo costo, es importante que sepas cuál es la tarjeta gráfica mínima necesaria para tus necesidades. En este artículo, te daremos una guía completa para que puedas tomar la mejor decisión.
¿Por qué es importante la tarjeta gráfica?
La tarjeta gráfica es un componente fundamental para cualquier ordenador que se utilice para jugar o para trabajar con software que requiere de un alto rendimiento gráfico. Si no tienes una tarjeta gráfica adecuada, es probable que experimentes problemas como baja calidad de imagen, baja velocidad de procesamiento, o incluso que algunos juegos o programas no funcionen correctamente.
¿Qué tarjeta gráfica necesito?
Dependiendo del uso que le des a tu ordenador, necesitarás una tarjeta gráfica con unas especificaciones u otras. A continuación, te mostramos las especificaciones mínimas recomendadas para distintos usos:
- Ofimática y navegación web: una tarjeta gráfica integrada es suficiente para este tipo de usos básicos.
- Juegos de baja exigencia gráfica: una tarjeta gráfica de gama baja como la Nvidia GT 1030 o la AMD Radeon RX 550 es suficiente.
- Juegos de alta exigencia gráfica: necesitarás una tarjeta gráfica de gama media o alta como la Nvidia GTX 1660 o la AMD Radeon RX 580.
- Edición de vídeo o diseño gráfico: necesitarás una tarjeta gráfica de gama alta o profesional como la Nvidia Quadro o la AMD Radeon Pro.
¿Qué marca de tarjeta gráfica es mejor?
En cuanto a marcas, las dos principales son Nvidia y AMD. Ambas tienen modelos de tarjetas gráficas de distintas gamas y precios, por lo que dependerá de tus necesidades y presupuesto elegir una u otra. Lo importante es que te asegures de que la tarjeta gráfica que elijas cumple con las especificaciones mínimas recomendadas para tus necesidades.
Todo lo que necesitas saber sobre GPU en tu PC: ¿Qué es y para qué sirve?
La GPU es un componente clave de cualquier computadora moderna. La sigla GPU significa «Unidad de Procesamiento de Gráficos» y se encarga de procesar y mostrar imágenes en la pantalla de tu ordenador.
La GPU de Escritorio de Bajo Costo es una alternativa económica para aquellos que desean mejorar la calidad gráfica de su PC, sin tener que gastar demasiado dinero. Estas GPUs son ideales para aquellos que buscan una mejora en el rendimiento de sus juegos, o para aquellos que desean realizar tareas que requieren una alta demanda gráfica, como edición de video o diseño gráfico.
Las GPUs de escritorio de bajo costo son muy populares entre los jugadores, ya que les permiten disfrutar de juegos más exigentes en términos gráficos sin tener que invertir una gran cantidad de dinero en una tarjeta gráfica de alta gama. Además, estas GPUs son fáciles de instalar y no requieren de conocimientos técnicos avanzados.
Las GPUs de escritorio de bajo costo están diseñadas para brindar un rendimiento óptimo a un costo accesible. A menudo, estas GPUs tienen menos memoria RAM y menos núcleos de procesamiento que las tarjetas gráficas de gama alta, pero siguen siendo una opción viable para aquellos que necesitan una mejora en el rendimiento gráfico de su PC.
Estas GPUs son fáciles de instalar, ofrecen un rendimiento óptimo y son ideales para los jugadores y para aquellos que realizan tareas que requieren una alta demanda gráfica.
Descubre cómo verificar si tu PC está utilizando la GPU de manera efectiva
Si tienes una GPU de escritorio de bajo costo, es posible que desees asegurarte de que está funcionando de manera efectiva. Una forma de hacerlo es verificar si tu PC está utilizando la GPU en lugar de la CPU para procesar ciertas tareas.
Existen varias formas de verificar esto. Una forma es abrir el Administrador de Tareas de Windows. En la pestaña «Rendimiento», puedes ver el uso de la CPU y la GPU. Si la GPU no está siendo utilizada, es posible que debas configurar tu PC para que utilice la GPU en lugar de la CPU.
Otra forma de verificar si la GPU está siendo utilizada es a través de software de monitoreo de hardware, como GPU-Z. Este software te permitirá ver la carga de la GPU y la temperatura en tiempo real. Si la carga de la GPU es baja, es posible que debas ajustar la configuración de tu PC para que la GPU sea utilizada de manera más efectiva.
También es importante asegurarte de que los controladores de la GPU estén actualizados. Los controladores son software que permiten que la GPU y el sistema operativo se comuniquen entre sí. Si los controladores están desactualizados, es posible que la GPU no funcione de manera efectiva.
Puedes hacer esto a través del Administrador de Tareas de Windows o utilizando software de monitoreo de hardware. Además, asegúrate de que los controladores estén actualizados para garantizar un rendimiento óptimo.
Put a Desktop GPU in a LAPTOP… The CHEAP WAY!
Me encanta la idea de las tarjetas gráficas externas, ya que te permiten tener un portátil ligero y portátil que puedes convertir fácilmente en un potente sistema de juegos cuando tienes tiempo para sentarte y tienes un enchufe cercano. Sin embargo, la principal queja que escuchamos es que puedes obtener el mismo nivel de rendimiento con una tarjeta PCIe por mucho menos dinero. Pero, ¿cómo se puede colocar una de estas en una de estas? La respuesta es con una de estas: el EXP GDC o la Beast, la forma económica y sencilla de aumentar la potencia de juego de tu portátil.
Ha habido varias versiones de la Beast, pero las anteriores no nos llamaban la atención porque se conectaban al sistema mediante puertos externos como ExpressCard (un estándar obsoleto o prácticamente muerto) o a puertos internos que no se podían perder. La mayoría de los portátiles solo tienen una ranura Mini PCIe que suele estar ocupada por la tarjeta Wi-Fi, un componente esencial de la experiencia móvil. Pero gracias a la versión nvme 9.5, tiene algunas grandes ventajas. En primer lugar, obtiene cuatro veces más carriles PCIe, y algunos dispositivos móviles incluso tienen más de una ranura M.2, lo que te permite tener tanto una unidad de arranque de alta velocidad como una GPU externa conectada al mismo tiempo. Además, debido a que no hay sobrecarga de protocolo, en teoría debería tener un rendimiento mejor que las cajas de Thunderbolt 3 como esta, a un costo mucho menor.
Para ponerlo a prueba, conectamos nuestra Beast al D Bottlenecker 5000, un potente equipo de escritorio con los tres métodos de conectividad que queremos evaluar. También tenemos una GTX 1080. En juegos gráficamente intensivos, el rendimiento de la Beast queda aproximadamente en el punto donde esperaríamos, entre el Razer Core con Thunderbolt 3 y una tarjeta gráfica funcionando a 16x conectada directamente a la placa base.
Entonces, esto suena genial si tienes una laptop con una ranura M.2 NVMe libre, como la que mencionamos anteriormente. Puedes obtener un rendimiento mejor que el de Thunderbolt 3 de manera más económica. Sin embargo, me sigo preguntando para quién es realmente útil esto. ¿De verdad vas a comprar una laptop nueva y luego cortar un agujero en la parte inferior para pasar los cables de la Beast? Considera algo un poco más viejo, como esta MSI GL62, que tiene una GTX 940M, que es mejor que nada, pero apenas suficiente para jugar a juegos modernos. Sin embargo, gracias a la ranura M.2 NVMe de la GL62, que se puede actualizar, y una Beast con algo como una GTX 960, puedes convertir la GL62 en una máquina lista para juegos por solo unos pocos cientos de dólares. En teoría, por supuesto.
Pero hay muchos problemas de compatibilidad. Incluso el Dell Inspiron Gaming, una máquina para la que este enfoque tendría sentido, requiere una BIOS personalizada. Nuestros esfuerzos básicamente han sido en vano. Finalmente, la incompatibilidad física y de firmware, la falta de documentación, el hecho de que necesitas reiniciar para conectar y desconectar el dispositivo, y el hecho de que probablemente anules la garantía, confinarán este producto a un nicho dentro de un nicho para siempre.
En resumen, las tarjetas gráficas externas pueden brindar un aumento de rendimiento a las laptops, pero tienen limitaciones y problemas de compatibilidad que las hacen poco prácticas para la mayoría de las personas. A menos que tengas una laptop específica con una ranura M.2 NVMe libre y estés dispuesto a lidiar con los inconvenientes, probablemente no valga la pena invertir en una tarjeta gráfica externa.